by Jera Romance
(España)
Decir que esperaba este libro casi con desesperación es quedarse corto, Patricia Sutherland nos hizo sufrir con la espera, pero cada día que he pasado esperando ha valido la pena.
Harley R. es el segundo libro de la serie Moteros, en él tenemos la historia de Abby y Evel. La mayoría que leímos Princesa nos quedamos con la imagen de una Abby caprichosa, no creíamos que lo que sentía por Dakota (ahora su cuñado) era amor, sino sólo capricho.
Desde las primeras palabras que leí de Harley R. vi a Abby como una mujer totalmente diferente, dejé de ver a la niña pesada, caprichosa, dejé de ver a "morticia" como la llama Dakota, y comencé a ver a la mujer que realmente es y pude ver a la mujer dolida, que sufre.
Evel es el mejor amigo y socio de Dakota, él se siente atraído por Abby hace tiempo, y comenzará a dar pasos de bebé para acercarse a ella. Evel es el príncipe azul, un caballero de los pies a la cabeza, un "bomboncito"... En definitiva es un hombre increíble, del que te enamoras desde el momento cero y que te roba el corazón en cada palabra o gesto. Es la dulzura hecha hombre.
Evel me ha transmitido paz, ternura, amor, fuerza...Y aunque parezca mentira logré "ver" su mirada y todo lo que ella transmite. Veremos como Abby poco a poco comienza a ver en él algo mucho más profundo.
"...Era él y esa ¿quietud? Ese lo que fuera que fluía del motero y hacía... Hacía ¿qué? Rebuscó entre sus cansadas neuronas una explicación y lo único que se le ocurrió fue que era como si la pusiera "en pausa"..."
Es una historia que va poco a poco, si no hubiera sido así no habría sido creíble, teníamos que ver como poco a poco Abby comienza a olvidarse de Dakota para comenzar a ver en Evel el hombre de su vida.
"- Dios... ¿Dónde has estado toda mi vida, Abby?- murmuró, pegándose a ella.
- ¿Dónde has estado tú toda la mía?..."
Conocemos a una Abby que sufre, que está cansada de que los hombres la usen, de no sentir que su amor sea correspondido. Evel le mostrará una vida diferente, y de a poco se dará cuenta que quien ocupa sus pensamientos todo el día es él.
"...de existir la perfección, estaba segura que el motero demonio la encarnaría a las mil maravillas."
Tengo que destacar a un personaje secundario que me robó el corazón, la abuela de Evel, la madre de él también, pero su abuela me ha sacado más de una sonrisa, y me enamoró la forma de adorar a su nieto.
"...es lo bastante especial para que tú, el hombre más especial que existe sobre la faz de la tierra, le dedique tiempo y atenciones. Si tú has reparado en ella, Brian, es que tiene todo de especial."
Volveremos a saber de Dakota y Tess, ¡que placer volver a saber de esta pareja!, ver cómo sigue adelante su relación, volver a escuchar a Dakota y que se te vuelva a dibujar una sonrisa en los labios. Veremos cómo siguen luchando por lo que sienten, por lo que tienen.
"...Nunca había necesitado a nadie en toda su vida, excepto a ella y desde el minuto cero. Era una necesidad que no había dejado de crecer y cuanto más tenía de Tess, más necesitaba tener..."
La historia de Abby y Evel es intensa, dura, apasionada, y con tanto sentimiento que traspasa las páginas. Más de una vez se me cayeron lágrimas durante la lectura.
"... no sé, entonces mi vida era una niebla permanente, muy espesa, y tú, la luz que brillaba al final del camino..."
"- ¿Cómo lo haces? ¿Cómo consigues que cada minuto que paso a tu lado sea inolvidable? Dímelo, por favor. Necesito saberlo- murmuró Evel mientras sostenía el rostro de Abby entre sus manos."
Cuando vayan a leer Harley R., olvídense de Princesa, no tiene nada que ver con este libro. En él me encontré una historia mucho más profunda, más desgarradora, hasta más pasional. Para mí Princesa y Harley R. son dos libros totalmente diferentes, pero sin dudas este último me ha dejado con la boca abierta y me ha sorprendido gratamente. Por que en él ves tantos sentimientos que te abruman, te encojen el corazón, te llenan los ojos de lágrimas y te ablandan el corazón... Harley R. es sentimiento puro.
"...llevas todas la vida preguntándote si alguna vez se te concederá el milagro de amar a alguien que también suspira por ti, y de experimentar, aunque más no sea una vez, qué se siente al unirte en cuerpo y alma a esa persona… Tú eres mi milagro, Abby, y deseo con toda el alma ser el tuyo."
Claudia.
Libros de Romántica
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